Los cruceiros constituyen sin lugar a duda una de las manifestaciones más típicas de la arquitectura popular gallega. Se estima que existen en torno a 12.000 a lo largo de toda la geografía de la Comunidad. El cruceiro es una cruz de piedra, de dimensiones variables, que se coloca en el cruce de caminos, atrios y en lugares cercanos a iglesias, ermitas o cementerios. “Suele alzarse sobre una plataforma con peldaños y tiene esculpido el crucifijo y, frecuentemente además, la Piedad o Quinta Angustia” (RAE). Según Castelao, lo correcto sería denominar “cruceiro” a la cruz solitaria y “calvario” a monumentos con episodios de la pasión de Cristo. El propio Castelao alude al cruceiro como una “oración de piedra” o un “perdón del cielo”. El cruceiro es un objeto sagrado, así como el lugar en el que se encuentra. Sus orígenes se sitúan en plena Edad Media (siglo XIV), alcanzando su mayor auge y esplendor entre los siglos XVII y XIX.


En Parderrubias destaca un bellisimo monumento, ubicado en el Trabazo, formado por un conjunto de tres cruceiros y un altar en el del centro. A este lugar llega todos los años la procesión de Corpus Christi, función que cumplen muchos cruceiros de este tipo en Galicia. En el siglo XIX existía un Calvario o Viacrucis (serie de cruces) que iba desde la Iglesia hasta este monumento de cruceiros. Se cuenta que su final fue trágico. El párroco de esa época intentó vender todas esas cruces que formaban el Calvario en contra de la opinión de sus feligreses, quienes mostraron una férrea oposición a ello. La noche anterior a ser retiradas por el potencial comprador, los vecinos las rompieron. El Conjunto de Cruceiros del Trabazo fue restaurado en el año 2008. En estas dos fotografías se puede ver su estado antes de esta restauración.


El aspecto actual de este bello conjunto se puede apreciar en las siguientes fotografías.


Un enclave habitual de los cruceiros en Galicia son las encrucijadas de caminos con el fin de proteger a los caminantes. El cruceiro ubicado en O Alcauzo podría responder a esta función, al situarse en la bifurcación del camino que conduce hasta la Iglesia Parroquial y el que lleva al Alcauzo. En las siguientes fotografías se aprecian diferentes perspectivas de este Cruceiro.


